lunes, 30 de julio de 2007

Yo, Juan Bobo

Cuando era niño tuve una maestra un tanto peculiar. La señora no tenía muchas luces, pero se creía la ostia. Aunque mi escuela era laica, la vieja de vez en cuando le gustaba la idea de ponerse a hablar de asuntos religiosos y políticos (Era PNP y evangélica, así que ya se pueden hacer una idea). Un día, se buscó un problema con los papás ateos de un amigo mio, cuando ellos se enteraron de que la doña estaba predicando a Cristo y que si no te bautizabas ibas pal infierno. Entonces sus padres vinieron a hablar con la vieja y la directora. Coño, si estás pagando (la escuela era privada) para que tus hijos reciban una educación secular, pues eso debe respetarse! Pero a esa maestra le daba igual.

Un día la maestra estaba dándonos una "clase" de geografía. Tenía la bola del mundo en su escritorio y nos iba diciendo cuáles eran los estados de (su adorada nación) EEUU. La mujer era tan lista, que se le ocurrió enseñarnos que Washington DC, estaba en la punta noroeste del mainland, y que Washington estado estaba en la costa este. A mi siempre me gustaron los mapas, y me estuvo un tanto raro, y en el recreo fui a corroborar al mapamundi si la maestra se había equivocado. En efecto, era un error suyo. Al otro día, la maestra volvió a confundir de lugar los dos Washingtons, y tuve la mala ocurrencia de levantar la mano y decirle "Oh no missy, es al revés." Qué verguenza...una mujer que se decía estadista, con un bachillerato en pedagogía, y ni siquiera sabía dónde coño estaba la capital del país al cual quería anexionarse. (Así están muchos en PR...) Pa qué fue aquello!!

La vieja se me rió en la cara. Y me dijo, "Qué dices tú, disparatero! Tú es que eres bien Juan Bobo." (Juan Bobo es un personaje típico puertorriqueño de cuentos infantiles. Un niño muy tonto que nunca le hacía caso a las figuras de autoridad, padres, maestros, etc. y al final de cada cuento se lleva una gran lección.) Pero aquí la que se llevó la sorpresa fue ella, cuando miró el globo y comprobó que yo tenía la razón. Tuvo que reconocer su error. Pero de ahí en adelante yo pasé a ser "Juan Bobo".

Cada vez que alzaba la mano para preguntar algo, la vieja decía: "A ver qué quiere el Juan Bobo este..." Si yo le hubiera dicho a mis padres lo que esa bruja me decía, seguro que hubieran venido a reclarmarle. Pero yo fui de los niños que siempre separó lo que ocurría en la escuela y en mi casa. Mis problemas en clase eran asunto mío. Y a pesar de lo que me jodía esa maestra, y alguno que otro cabroncillo, jamás fui con ñoñerías a mis padres.

En fin, que la vieja me estuvo llamando Juan Bobo hasta que me gradué de esa escuela. Yo sé que lo hacía porque la había dejado en ridículo frente a la clase entera. Pero nunca lo hice con esa intención. Yo era un niño, y sólo quería demostrar que sabía algo. Lo normal hubiera sido que me felicitara, no que me pusiera un sobrenombre....pero bueno, la vieja era PNP y evangélica, qué se puede esperar??

A lo que quiero llegar con toda esta cantaleta es que el haber tenido una maestra tan bicha, pudo haberme traumado, pero en realidad me hizo más fuerte. Después de graduarme de esa escuela, jamás la volví a ver. Ni siqueira sé si está viva. Lo que sí sé es que las burlas y humillaciones a las que me sometió frente a mis compañeros me sirvieron de mucho. Hoy día cada vez que tengo un obstáculo en la vida, me imagino que estoy saltando sobre ella, y en pleno brinco le suelto un peo en la cara. Cada éxito que tengo, sea académico, económico o profesional, también se lo dedico a ella.

Por eso, Sra. M.R., si me está leyendo, le digo gracias. Gracias por enseñarme a quién no debía parecerme cuando creciera. Gracias por enseñarme cómo no deben tratarse a los seres humanos. Gracias por enseñarme que las figuras de autoridad no son dioses, sino simples mortales con defectos. Sobretodo gracias por darme la primera oportunidad de dudar. Y gracias, por darme las fuerzas y el coraje para cagarme siempre en la estirpe de comemierdas que usted representa.

Aquí está tu Juan Bobo, baby.

viernes, 27 de julio de 2007

Secuestré a Dios

La Iglesia catolica dice que los apostatas no pueden comulgar. Estamos excomulgados.

Ayer salgo a la calle a probar si eso es cierto.

(Comienza el soundtrack de Mision Imposible)

Entro a la catedral de la ciudad donde vivo. Esta medio llena. Los monagillos me miran sospechosamente. Asi que me persigno. Escucho atentamente la misa. Ya no me miran. Durante la celebracion digo "por TU culpa, por TU culpa, por tu GRAN culpa". Nadie lo nota. Por fin llega el momento de la comunion. Me levanto. Hago fila. Cuando el obispo esta a punto de ponerme la ostia en la lengua, le saco la palma de mi mano para que la ponga en ella. (Esta permitido). Agarro la ostia, me doy media vuelta, y cuando estoy a punto de cometer el sacrilegio de meter el cuerpo de Cristo en este templo impio, se me ocurre una mejor idea:

Secuestrar la ostia.

Mientras hago que estoy chupando la galleta, disimuladamente me la meto en el bolsillo de mi camisa. Les doy la paz del Señor a todos.

"Demos gracias al Señor..."

La misa acaba.

Salgo a la calle. Entro al metro.

Mision Cumplida.

Aqui está. Una aparente galleta insipida. Un símbolo por el cual se han matado miles de seres humanos. Y lo tengo aquí, justo en la palma de mi mano. Me gustaría darle unas nalgadas, pero no tiene culo. Me gustaría decirle unas cuantas cosas, pero no tiene orejas. Me gustaria darle un par de ostias, pero ya es una ostia. Me gustaría darle una un par de galletas pero ya es una galleta. Así que siguiendo la convencion de Ginebra, dentro del tratado sobre prisioneros, decido darle un trato digno. La meto dentro de una Playboy. Mejor no se puede estar.

Tengo secuestrado a Dios.

¿Cuánto me ofrecerán en Ebay por su liberación?

jueves, 26 de julio de 2007

Nombres boricuas

¿Pueden haber nombres más boricuas que Jesús Figueroa y Jessica Rodríguez?

Esos nombres me saben a quenepa! Huelen a mavi! Suenan a bomba y plena!

¿Qué otro nombre te suena BIEN boricua?

El pesado pesado bagaje de la tradición

Hoy sale en el periódico: 74% de los españoles son católicos. De ese grupo 49.4% dice nunca ir a ceremonias religiosas. (Fuente: estudio Actitudes sociales de los españoles, Fundación BBVA).

Mi pregunta es: ¿Puede llamarse "católico" una persona que NUNCA va a misa? ¿Sabrán éstos lo que la doctrinca católica dice al respecto? Amigos católicos: ¡están dejando plantado a Cristo cada domingo!! Qué clase de cristiano es ese que deja a su maestro y salvador esperando?! Especialmente cuando se supone que "sabes" que visitarlo es la puerta a la vida eterna!! Si crees que eso es cierto, entonces estás loco si no vas a misa!

Mi opinión es que la mayoría de ese 49.4% son concientes de ello, pero les da igual. Son indiferentes a la religión; y católicos sólo de nombre, por tradición. Lo que no entiendo es, por qué si una tradición te es inservible, si no la usas nunca, ni la pones en práctica, ni estás del todo de acuerdo con ella; POR QUÉ no la descartas?!?! Lo que no sirve, se tira a la basura!

A veces pienso que este tipo de "católicos" en realidad son "ateos-prácticos". Es decir, they live godless lives; Dios no existe en ninguna esfera de su vida (Excepto cuando un pariente se les está muriendo...Cuando hay problemas.) Pero la mayoría de estos ateos-prácticos, no son concientes de su ateísmo; y si les mencionas la palabra "ateo" se persignan! Son víctimas de prejuicios, su propia ignorancia e hipocresía.

Para muchos "católicos", la religión es una carga, un pain in the ass, Pero la gente prefiere no cuestionar el sistema. Prefieren hacerse de la vista larga. Decir hipócritamente que son católicos "no-practicantes", cuando eso es un concepto totalmente absurdo. La iglesia católica, es la que pone las reglas, no los creyentes. Y una de las reglas es: ¡Vas a misa o al infierno!

¡Desechemos lo que no nos sirve!

miércoles, 25 de julio de 2007

Cómo llegué a ser ateo (parte 2)

(viene del post anterior)

La manera en que una persona "se hace" atea puede revelarnos mucho sobre lo que significa el ateísmo. Hay muchas razones posibles para llegar a ser ateo. Podemos citar por ejemplo, la rebelión típica de la adolescencia, y muchas otras más. Sin embargo aquí sólo voy a hablar de mi experiencia. ¿Cómo llegué a la conclusión de que era ateo?

Cuando tenía 20 años mi mente contenía un set de creencias muy específicas. Ahí dentro se encontraban todas las deidades judeocristianas (Trinidad, santos, ángeles, arcángeles), además de todas las deidades que había conocido de otras religiones, como el hinduismo y el budismo. Mi cabeza era un nído de eclecticismo religioso. Yo había comenzado a acumular ese bagaje de "dioses" desde que mi madre me enseño a rezar el "ángel de la guarda". Fui un teísta indoctrinado pasivamente, pero también activamente, pues yo busqué conocer otras religiones, y entre los 15 y 20 años acepté muchas doctrinas como verdaderas (karma, reencarnación, y más).

En mi caso, el proceso por el cual me hice ateo se vincula al estudio de los orígenes de mis creencias. Es importante subrayar, que la intención que me llevó a estudiarlos, no fue para probar que eran creencias falsas. ¡Yo creía que eran ciertas! De hecho, yo no tenía idea de que terminaría siendo ateo. Cuando estudié el origen de mis creencias, lo hice por curiosidad, por querer comprender mejor lo que yo decía creer. Y vaya sorpresa que me llevé.

Afortunadamente para mí, los escritos que llegaron a mis manos, no eran todos textos oficiales aprobados por los religiosos. Pude leer libros escritos por historiadores independientes y más o menos objetivos. Esto es de vital importancia, pues cuando una persona quiere desarrollar el pensamiento crítico, es necesario someterse a opiniones contrarias. Si eres alguien que sólo escucha un lado de la historia, si te conformas con oir sólo una versión de los hechos; entonces tu mente no será jamás una mente crítica. Hacen falta los contrastes. Y bien que los tuve.

No quiero alargar mucho el asunto de cuáles fueron los elementos que despertaron en mi cabeza la alarma. Sólo basta con decir que la información que encontré fue lo suficientemente contundente para convencerme. Convencerme de que el cristianismo, como sistema religioso, fue un fraude desde sus inicios y continúa siéndolo. Así mismo los estudios me convencieron de que el resto de las creencias que yo poseía, como karma y reencarnación, eran igualmente fabricados.

Mi llegada al ateísmo puede resumirse como un lento proceso por el cual las fuentes de mis creencias fueron siendo, una tras otra, desacreditadas. En el momento en que empecé a ver a quienes predicaban mis creencias como mentirosos, comencé a desechar todo lo que me habían enseñado como verdadero. Esto fue un periodo que duró alrededor de 3 años; como entrar a una casa abandonada, que nadie ha abierto en décadas, e ir detectando mierda, mierda muy escondida, limpiándola con Clorox. Entre las mentiras que debí limpiar se encontraba la idea de pecado original, la idea de que los homosexuales son seres malignos, la idea de que hay un solo dios verdadero, la idea de que existe un infierno, y muchas otras más. (Pero esto es materia para otro blogazo). En fin, la limpieza no sólo incluía descartar supersticiones y la creencia en dioses, sino toda una serie de prejuicios anexos a las religiones; prejuicios que son la causa de que el mundo esté tan jodido como está.

El día en que esas creencias específicas que me habían metido en mi hard disk cerebral, fueron eliminadas con el anti-virus del conocimiento; el día que esas creencias desaparecieron, fue el día en que me di cuenta que era ateo. No me hizo falta negar la existencia de ningún dios o dioses. Hasta la fecha, aun no me ha hecho falta decir "Dios no existe". El convencimiento de que soy ateo, no proviene de que yo sepa que dios no exista, sino de que sé que dios no existe en mi vida. Y de eso debe tratarse esto, del convencimiento individual, que no intenta imponerse a nadie. Si mañana alguien viene y me dice que su dios es real, ¿quién soy yo para refutarlo? Esa es su verdad interior. La respeto, siempre y cuando no me quieran imponer ese criterio. (Por eso defiendo la completa separación de Iglesia y Estado. Si a los religiosos no le gusta oirle el pico a los ateos, ¿entonces por qué tenemos que oirles el pico a ellos?) Si los dioses existen de hecho, objetivamente, en el mundo real, eso es un asunto que no me compete, y que me tiene sin cuidado, y le dedico el mismo tiempo que al asunto de la existencia de los Pitufos. El que quiera probarme que existe algún dios que saque las evidencias, y luego que se atenga al bombardeo de mi escepticismo.

Soy ateo, pero mi ateísmo no es un modo activo de pensar (mi escepticismo sí lo es). El ateísmo no es una doctrina que tenga unas reglas de cómo debemos ver el mundo. Cada ateo es un continente separado. Cada uno tiene sus razones para descreer. Así pues, las acciones que hago, las ideas que pienso, jamás las hago en referencia a mi ateísmo. No defino mi vida respecto al teísmo o la falta de dios en ella. Mi ateísmo es sencillamente una carencia de creencias. Una oportunidad para construirme a mí mismo, en base a mis propios criterios y no los que otros me predican; un estado donde los dioses se vuelven irrelevantes, al grado que se extinguen, del mismo modo que le ocurre a un niño cuando descubre que Santa Claus no existe. Así como nadie se define por su falta de creencia en Santa Claus, yo como ateo tampoco me defino por mi falta de creer en Dios. El ateo se define por lo que hace como individuo. (Otro tema para blogazo.)

Dado que el ateísmo no es una doctrina que se pueda predicar, el único propósito que surge en mi vida respecto a mi condición atea es limpiar la mala imagen que los religiosos han creado sobre los ateos. Comenzando por aclarar que no todos los ateos niegan la existencia de sus dioses. Lo que todos sí podemos hacer es AFIRMAR que los dioses no son necesarios para vivir una vida digna, llena de valores y aspiraciones. Los dioses tampoco son necesarios para que vivamos con principios morales como el respeto a los demás y el amor. ¿Dónde está la prueba de esto? La prueba de esto debe encontrarse en los ateos mismos. Ese es nuestro reto.

martes, 24 de julio de 2007

Cómo llegué a ser ateo (parte 1)

Sólo hace falta abrir el diccionario para darnos cuenta del nivel de desconocimiento y prejuicios que hay sobre el término "ateísmo". La culpa no es de los diccionarios. Estos sólo nos muestran el estado de conocimiento en que se encuentra la mayoría de la socidad respecto al ateísmo. Nos da una idea de lo mucho que debemos trabajar, y dar el ejemplo, para probar a una población mayormente teísta, que los ateos podemos ser grandes seres humanos, con sentido moral, y ciudadanos ejemplares.

Durante mi niñez y adolescencia fui educado dentro de la tradición religiosa católica. Siempre me consideré una persona espiritual. En mi mente surgían diariamente preguntas nuevas en cuanto a lo religioso. Pero muchas veces nadie era capaz de contestarlas. En aquel entonces entendía que la obligación de las autoridadades religiosas (los sacerdotes) era darme las respuestas que pedía. Pero cada vez que brotaba de mí una pregunta demasiado difícil, me decían que eso era "inexplicable", "incomprensible para el hombre" o un "misterio". Por algún tiempo me conformé con esa excusa, pero eso convirtió mi cabeza en una holla de presión.

Eventualmente me harté de no recibir respuestas, y comencé a buscarlas en otros lugares. Otras religiones, filosofías orientales, etc. Pero con el tiempo me volvió a ocurrir algo similar. Tenía preguntas muy difíciles que nadie me podía contestar. Esta situación se juntó al hecho de que comencé a estudiar filosofía en la universidad. En la universidad me enseñaron el concepto de pensamiento crítico, y el ver la duda como un método para alcanzar el conocimiento y evitar el error. Desde niño había oído eso del "método científico", Galileo, etc. Pero fue durante las clases de filosofía donde aprendí el verdadero sentido de esto. El método científico no tiene por que limitarse a las ciencias experimentales, también puede ser parte de nuestra forma de pensar. En la vida, constantemente aceptamos argumentos sin detenernos a pensar si estos son correctos, verdaderos o falsos. Dudar sobre algo no implica que aquello sobre lo que se duda sea falso. Dudar es una manera de conocer mejor lo que decimos "conocer". Por eso, nadie debe temer a dudar sobre sus creencias. Pues el propósito de la duda no es otro que alcanzar una certeza sobre lo que conocemos; que ya no podamos decir "Creo x cosa, por que mis papás me lo enseñaron." Por eso pienso que la duda es el nacimiento del hombre maduro.

Con los años, el estudio de las religiones me llevó a concluir que lo que se me había enseñado desde pequeño respecto a Dios, era un fraude. (Eso es materia para otro blogazo). El asunto es que una vez llegué a la conclusión de que la religión que se me había enseñado era un fraude, tenía que definir mi posición en cuanto a Dios. Durante un tiempo consideré una definición personal de Dios, luego me llamé agnóstico. Pero me di cuenta que ese Dios en el cual pensaba, no era más que un invento en mi cabeza. Me di cuenta, que vivía mi vida totalmente al margen de la religión; Dios no existía más en ella. Dios se hizo tan irrelevante, que un buen día, sin darme cuenta, desaparció. Y fue así, como comenzó el proceso por el cual fui aceptando el término maldito: ateo.

(Continúa)

Michael Moore le rompe el culo a CNN en vivo y directo

Hace un mes escribí aquí mi opinión sobre Sicko, el nuevo documental de Moore.

Ahora Moore nos deleita con otro célebre momento. Es de las pocas veces que vemos a una persona con verdaderos huevos enfrentarse al sistema y ventear las verdades que pocos se atreven a mencionar. Esto es un clásico!

lunes, 23 de julio de 2007

¿Qué tienen en común un violador, un adúltero y un gay?

Acabo de leer una noticia espantosa que da qué pensar. Muchas veces trato de convencer a la gente de que las fobias anti-musulmanes son producto de prejuicios, y no contribuyen en nada a nuestra sociedad. A veces en teoría las cosas suenan tan bonitas. Ya lo cantaba así John Lennon en Imagine. Un mundo si religiones, una hermandad entre todos los seres humanos...etc etc.

Pero hoy abro el periódico mañanero, y veo la noticia de que en Irán acaban de ahorcar juntitos a 16 personas, por violadores, adúlteros y homosexuales. (Ahora la prensa tiene que buscar todo lo malo que se hace en Irán, para justificar ante la opiníon pública una posible invasión.) Ahorcar a un ser humano ya de por sí es bastante horroroso y deplorable. Pero aquí quiero llamar la atención a la manera en que estos crimenes distintos son materia para el mismo castigo.

Podríamos analizar estos tres crímenes en base a la violencia física y a una violencia contra la voluntad. Violar es tanto violencia contra el cuerpo como contra la voluntad. Adulterar es violencia contra la voluntad. ¿Pero en dónde cabe la violencia en el acto homosexual? Si de lo que se trata es de romper culos, hay muchos maridos que se lo rompen a sus mujeres con todo y burka. ¿Qué es lo que hace estos tres actos merecedores del mismo castigo?

El problema que subyace aquí, es que las teocracias no criminalizan el acto de imponer una voluntad, porque la esencia misma de la teocracia es forzar una voluntad unilateral sobre todos las demás. Las teocracias son una violación psicológica en masa. Por lo tanto es de esperarse que en tales regímenes no se castigue la imposición de la voluntad sobre otras personas. Así pues el elemento común en los actos "violar, ser adúltero y ser gay", no es más que un hecho puramente físico: el haber llevado a cabo una actividad sexual "ilícita" ante la ley islámica (en este punto coincide con la ley mosaica).

Esto nos hace pensar que en Irán, no ahorcan a un violador por forzar violentamente a una mujer a tener sexo, sino por haber metido su pinga en un shoshillo que no le correspondía. Que no es otra cosa que lo mismo que hacen los adúlteros: meter la pinga en un shoshillo que no le corresponde. Exactamente lo mismo que hacen los homosexuales, meter la pinga en....bueno, el rotillo que no corresponde.

Que a la mujer le hayan destruído su dignidad e integridad, que la hayan dejado traumatizada de por vida, que la hayan maltratado físicamente, que la hayan sometido a un acto que ella no quería; eso ni siquiera se menciona en la maldita ley islámica, por lo tanto no se castiga. Lo que se castiga es el acto del pipí malcriado, el pipí impío.

Hela ahí, queridos irreverentes: Una prueba más de cómo las teocracias violan los derechos humanos. En EEUU y en Puerto Rico, muchos decerebrados querrían que el gobierno cambiara a una teocracia (basada en la Biblia). Pero eso ya ocurrió durante la Edad Media, y con razón a esa época se le llama la edad oscura. Y nosotros, los irreverentes, ateos, seculares y humanistas, lucharemos para que se respeten los principios laicos de Jefferson y Franklin, la separación absoluta de Iglesia y Estado, y que eso jamás vuelva a ocurrir.

viernes, 20 de julio de 2007

¿Es el catolicismo una secta de vampiros caníbales?

Hace poco se me ocurrió una interesante cuestión. Los católicos dicen que comer y beber el cuerpo y sangre de Jesucristo es lo que nos da la "vida eterna". Esto me recuerda mucho al mito de los vampiros, quienes son inmortales gracias a la sangre que beben. No sé hasta qué punto la leyenda de Drácula se base en creencias católicas, pero ese no es el tema.

Todos sabemos que los católicos piensan que tomar y comer el cuerpo de Jesús, es la via más eficaz para llegar al cielo. Entonces me gustaría saber qué ocurriría en el siguiente caso hipotético:

Supongamos que tenemos una máquina para viajar en el tiempo. Metemos 500 católicos en la máquina, y los mandamos al pasado al momento justo en que Cristo está agonizando en la cruz. ¿Qué harían los católicos? Si lo salvan de la cruz, entonces Jesús no muere, por lo tanto no hay sacrificio, y sin sacrificio no hay salvación, sin salvación no hay vida eterna. Así pues, Jesús salva cada domingo a los católicos, pero...¿los católicos lo salvarían a él?

Segundo. Dado que la sangre y el cuerpo de Cristo salva, también me gustaría saber cuántos de esos 500 católicos estarían dispuestos a pegarle la lengua a los borbotones de sangre que caían por la cruz en el momento de la crucifixión. ¿Terminarían todos como Carrie en su prom?

Tercero. También me pregunto si estos 500 católicos enterrarían a Jesús, o terminarían comiéndose su cadaver. Comer su cuerpo salva, ¿no? Entonces ¡¿qué mejor oportunidad de hacerlo que ésta?! Aquí no hay galletitas ni vinitos ni transubstanciaciones ni consagraciones que hagan falta. This is THE REAL THING, baby! La vera mera sangre y cuerpo de Cristo!! Ready pa tus colmillos! Mmmmm! ¡Qué banquete!

Cuarto. Si la máquina del tiempo se dañara y no pudieran volver a la Tierra, sería lícito agarrar la sangre de Jesús y hacer una morcilla con ella para futuras misas?

Quinto. En caso de un apocalipsis repentino, el producto fecal generado por el consumo de ese cuerpo y sangre, podría reciclarse como materia eucarística?

Espero que algún católico me aclare un poco en este tema tan confuso.

miércoles, 18 de julio de 2007

Opinión pública en Puerto Rico

Quiero compartir con ustedes un ejemplo del tipo de comentarios que tengo que soportar cada vez que leo la version electronica de El Nuevo Dia.

" Dios nos coja confesados si la Clinton llega a la presidencia!!! Hay que estar alerta, porque si los Demócratas ganan la Presidencia en el 2008, los gays y los abortistas se harán con el poder en los EEUU. Meterán a la trágala toda su agenda anti-moral porque esa es su actuación cuando llegan al poder. Cuando no tienen el poder lloran por sus “derechos” o hacen documentales como Gore; pero cuando están en el poder arrollan al que se les meta de frente. Están súper enfocados en derrotar a Bush y se inventan y exageran todos los errores del Presidente. Todo para empujarnos su agenda gay y abortista. La Clinton y Gore son de entre ellos los más activistas de lo anti-moral."

Estas son las personas que dicen que los horrores de la guerra de Irak son exageraciones de la prensa. Y eso, que todos sabemos que la prensa americana ha sido pro-guerra desde que al loco Bush le dio con meterse en Iraq. No me quiero imaginar si la prensa fuera democrata.

Estos energúmenos fanáticos, quienes mezclan política y religión, incluso niegan que exista un calentamiento global. Dicen que la homosexualidad es sinónimo del colapso de la familia y la sociedad, y que el aborto es la causa de desastres como el huracan Katrina. ¡Bravo por esos conocimientos cietíficos!!

En otros pases civilizados, tales comentarios sonarían ridículos hasta en los oídos de los más conservadores. Quizá a excepción de Aznar y sus secuaces...) Pues sí, éste es el status del pensamiento medio en Puerto Rico, la generacion de intelectuales "criados en el evangelio". Los PNPs, republicanos, cristianos, pentecostales, los que dicen que no van a la universidad pq no es gratis, que dicen no tener trabajo pq "la cosa está mala", y que cogen cupones hasta pa pagarle el Alpo a Fluffy.

¡Ay madre! ¡Dios nos coja confesaítos!

martes, 17 de julio de 2007

El agnosticismo (parte 4): Diálogo entre un agnóstico y un ateo preguntón

Nota: El siguiente diálogo representa algunas características del pensamiento de ciertos agnósticos. Hay muchas variedades de pensamiento. Y creemos que ésta es una de ellas. Hay más, pero en su momento ya le caerá su aguita. Así que no piensen que este diálogo representa el pensamiento de todos los agnósticos o ateos.

¡Oye, Moncho!

—Dímelo, panín.

Me dijeron que ahora eras "agnóstico".

—Sí, sí.

¿Qué piensas sobre la existencia de Paramajumba?

—Pues fíjate... La verdad no lo sé, panín. Además creo que nuestra mente no es lo suficientemente evolucionada para resolver ese problema. Así que puede que sí, como puede que no.

No lo sabes...

—Claro que no. Si lo supiera, te lo juro que te lo diría.

¿Es una posibilidad, dices?

—Mesmamente.

¿Entonces no crees en Paramajumba?

—Pues no lo sé, ya te dije.

¿Pero cómo es posible?

—¿Qué?

¡Que no sepas si crees o no crees!

—¡Ay no me confundas!

Moncho. Ya me dijiste que no sabes si existe o no; pero es imposible que no sepas si crees o no crees en Paramajumba.

—Ya te dije que NO SÉ.

Moncho, ¿tú sabes en lo que tú crees?

—Pues claro. Si no lo sé yo, ¡nadie lo sabe!

Coño, pues dime si crees en Paramajumba, ¡y no te jodo más!

—¿Acaso me preguntas si tengo fe en la existencia Paramajumba?

¿Acaso hay una creencia religiosa sin una fe que la sustente?

—¡Pues claro que no! La fe es el pilar de las creencias, lo dicen todos los textos sagrados. La fe es la certeza de todo lo que no podemos comprobar con los sentidos.

Bien. Pues contéstame: ¿Tienes fe en que Paramajumba existe?

—No fastides, ¡claro que no!

¡Eso es lo que quería saber!, cálmate chico.

—Qué, !¿me ves la cara de iguana o qué?!

No no. Es que me dices que no tienes fe en Paramajumba, aunque sí sea posible que exista.

—Exacto. Es posible. No puedo saberlo con seguridad. Por eso ni niego ni afirmo.

Oye y por casualidad, ¿para ti hay algún otro dios cuya existencia creas posible?

—Claro, por eso soy ag - nós - ti - co. ¿Ves?

Ok. Entonces, ¿ cu - á - les ?

—¿Cuáles qué?

Pues, ¿qué otro dios, aparte de Paramajumba, piensas que es posible que exista?

—Hmmm...pues...Hay un montón de dioses, chico.

¿Thor, el dios nórdico del rayo?

—Qué va! ¿Estás tú loco?

¿Júpiter, su homólogo romano?

—¿Pero crees que soy tonto? ¡Estudié cómo los romanos se lo fusilaron a los griegos!

Quetzatcoatl...¿crees que es posible que exista la Serpiente Emplumada?

—Eso se lo inventaron los indios en México, tonto. ¿No es obvio?

Pues coño, Moncho, ¡dime al menos uno de los dioses de las religiones mundiales, que piensas que sea posible que exista!

(20 minutos después...)

—La verdad no lo sé. Es que la gente inventa mucho...

¿Entonces por qué te llamas agnóstico?

—¡Pues porque no sé si hay dios o no! Soy agnóstico porque aunque no tengo la certeza, pienso que hay una posibilidad de que exista Dios.

Pero no me puedes decir cúal dios.

—Pues chico, ese: ¡Dios!

¡Dame el nombre y el apellido!

—¡Pues el Dios de siempre coño!

¿Te refieres al Dios cristiano de la Santísima Trinidad, del cual sale Jesús el salvador de la humanidad?

—Bah! Todos sabemos que eso es un invento del siglo III, panín. Vi un documental...

¿Te refieres a Alá? ¿Es posible que Alá exista?

—¿El que dictó el Corán y manda a pilotos estrellarse en los Niuyores?? ¿Tás tú loco!? Otro invento humano, más...

Moncho, pues si no crees, ni tienes fe en ningún Dios, entonces no eres agnóstico.

—¿Qué soy entonces?

Ateo. Eso es lo define a los ateos. No creen en ningún dios o dioses y algunos ni en la madre que los parió.

—Pero yo no puedo negar que dios exista.

No creer en Dios no es sinónimo de negar a Dios. Para negar o afirmar una idea, primero hace falta conocerla racionalmente. Muchos ateos piensan que la idea de Dios es irracional, una idea que puede significar todo y nada a la vez. No hace falta más que preguntarle a un número de creyentes, qué significa Dios, y veremos que todos tienen definiciones distintas y contradictorias.

—¿Entonces qué significa Dios para un ateo?

Cuando un ateo oye la palabra "Dios", es exactamente lo mismo que cuando escucha a su perro tirarse un peo tras su siestita.

—Ja!! Me ahogo!

Dios es un "macroconcepto", que la civilización ha ido inflando e inflando, sin importar si lo que le ha entrado a ese globo ha sido helio o aire de peos. Cada ateo menciona razones distintas para no creer en Dios. Yo soy ateo porque ningún creyente me ha podido convencer de que su Dios sea real. Ojo, esto no significa que yo los acuse de creer en un Dios falso!

—¿Cuál es la diferencia?

Cuando un creyente le afirma a un ateo que su Dios existe, un ateo sólo tiene dos opciones: 1) creerlo por fe; es decir, hacer lo mismo que hace el creyente. O 2) Pedir evidencias al creyente.

Si tu no tienes fe, o el creyente no te aporta evidencias, eso no es prueba de que el Dios en el que cree existe o no existe. Tenemos sencillamente una idea sin sustento: la existencia de Dios. Una hipótesis descartable, hasta que quien la afirma pruebe, con evidencias, que es correcta.

Si tu no aceptas la creencia en ningún dios, no importa por qué causa (falta de fe, o falta de evidencia), entonces, eres ateo.

—Pero yo he oído a ateos negar a Dios. Algunos dicen que saben que Dios no existe.

Bueno Moncho. Algunos ateos que lo hacen. A veces tras estudiar los principales fenómenos religiosos mundiales, se dan cuenta que son un fraude, y entonces deducen que todas los fenómenos religiosos son fraudes, por lo tanto Dios no existe, es sólo un invento de la mente del hombre. A estos ateos se les llama ateos "explícitos" o "fuertes". Cada uno aporta distintos posibles "argumentos" contra la existencia de Dios.

—¿Y los otros?

Los otros ateos, que en mi opinión son la mayoría, piensan que para ser ateo no hace falta negar la existencia de Dios. Sencillamente el no creer en dioses, te hace, por definición ateo. El ateo "débil" no se mete dentro del debate de tener que probar la inexistencia de nada. Muchos ateos de esta clase encuentran absurdas las pretensiones de los ateos "fuertes" de querer aportar evidencias definitivas para la no existencia de Dios.

—Bueno, ambos casos parecen ser distintos. ¿Entonces qué hace falta para ser ateo?

Pues los ateos no se ponen de acuerdo. Pero si hay algo que los unifica es que todos carecen de creencias en la existencia de una deidad. Negar la existencia de Dios parece ser un asunto posterior.

—¿Qué piensan los ateos sobre los agnósticos?

En general, existe la percepción de que son personas con problemas para definirse. Algunos son teístas o ateos de closet, quienes prefieren autollamarse agnósticos pues creen que esa palabra connota una mentalidad abierta. Sin embargo hay ateos que dicen ser también agnósticos. En realidad, hay de todo.

Si tu eres agnóstico, pregúntate en qué deidades crees. Si la respuesta es "en ninguna". Entonces, Moncho eres ateo.

—Bueno no creo en ninguna específica, ¡pero yo creo que es posible que exista Dios!

Y muchos ateos también te dirán que "es posible" que exista Dios, como también es posible que exista Santa Claus, el duende de Keebler, y el mismo Gigante Verde con sus mazorcas.

—No comparemos a Dios con Santa Claus...

Moncho, de la misma manera que una persona sensata no se pone a hablar sobre la posibilidad de que exista Santa Claus, un ateo no se a verificar si Zeus, Krishna o Artemisa existen. Para él son simples seres imaginarios, hasta que se le pruebe lo contrario.

—Pero esos dioses que mencionas suenan ridículos...pongámonos serios.

¿Entonces de una vez, dime seriamente cuál Dios, dios o dioses crees posible(s)?

—Pues Dios, el Creador del universo y el ser humano. Es como una Fuerza...una Energía... No es fácil definirlo con palabras.

¿No crees que es posible que exista algún dios tradicional con su nombre y apellido, como Ganesh el dios con cabeza de elefante?

—Fantasías puras.

Entonces, ¿en quién te basas para hablar de que es posible que exista esa "Energía"? No me digas que estás metido en astrología y esas cosas.

—No, no! La Energía Suprema...Ese es el Dios en que pienso cuando pienso en Dios.

Digamos que tienes tu propia versión sobre cómo podría ser Dios.

—Pues claro.

¿Y como llegaste a esa versión? ¿Leyendo algún texto sagrado? ¿Recibiste alguna revelación divina? ¿Mirando por un telescopio alguna galaxia lejana?

—No, no, no, no! Sólo reflexionando, lo pensé, como una posibilidad.

Si no lo sacaste de ningún otro lugar, entonces ¿no es eso acaso una posibilidad inventada por tí mismo?

—Bueno, de cierto modo una conceptualización. Todo el mundo conceptualiza a su Dios a su manera. Mi hipótesis de Dios, pongámoslo así.

Me sorprende tu bagaje científico.

—Se hace lo que se puede...

Pero sobre lo de conceptualizar tu propio Dios, ¿no es eso lo mismo que —según tú mismo dijiste— hicieron los romanos y los aztecas?

—Sip, pero ellos se pasaban de la raya, loco. No creo que haya un dios metiéndose en los asuntos humanos, pidiendo sangre de vírgenes, ni mandando gente al infierno. Eso definitivamente son inventos humanos.

Moncho, vamos a ver. Tú no crees en ningún dios creado por los hombres, sin embargo crees posible que exista uno como, por ejemplo, el que tu mismo has concebido! La Energía esa o como se llame...

—Sí.

Pero no estás seguro de si existe o no.

—Exactamente. Si estuviera seguro fundaba una religión mañana mismo, mano. Iglesia de los Energéticos Unidos, o algo así.

Pero piensa un momento. ¿Cuántos dioses distintos y posibles crees que podrías "conceptualizar"?

—Unos cuantos, supongo...Energía...Fuerza Sobrenatural...El Gran Weblogger...el Espíritu Cósmico...Y más poderoso que Júpiter o la misma Energía. Incluso podría ser una Diosa, ¡con tetas! ¿¿Por qué no?? No hay que ser machista...

¿Y por qué crees que es más probable que exista un dios inventado por tí que un dios azteca o griego?

—Hmm...porque esa gente se les subía la poesía a la cabeza, o se fumaban algo. Estoy seguro.

Moncho, ¿te das cuenta que cuando planteas la posibilidad de que exista un dios, fundamentas esa posibilidad en tu capacidad de imaginación y no en evidencias?

—Explícate.

Estás diciendo que es más "posible" que exista cuanta deidad, divinidad se te ocurra, ¡sólo por el hecho de que, en comparación a los griegos, posees una imaginación sensata! Tú aceptas que no te basas en ningún dios de las religiones ya existentes, ¿verdad?

—Exacto.

¿Tampoco crees en los dioses de los vecinos locos que van predicando por ahí sus alucinaciones?

—Tampoco.

Luego el único dios restante en el que puedas pensar, "cuando piensas en Dios", tiene necesariamente que haber sido creado por tu propia mente.

— ........................ajá.

Entonces conceptualizas un dios. Y dices que es posible que exista.

—Sí.

Pero luego dices, que puedes conceptualizar otros dioses, incluso superiores al primero. Y también dices que es posible que existan.

—Claro, aunque no lo pueda saber con un 100% de seguridad.

Moncho, entonces puedes ver que estás haciendo lo mismo que han hecho aquellos que inventaron las religiones. Sólo que ellos crean una divinidad para afirmar su existencia. ¡¡Y tú creas una divinidad para luego ponerla en duda!!

—Que yó creo qué?? No te sigo muy bien.

Lo que trato de decirte es que la única manera que tienes para mantener tu condición de "agnóstico", es recurriendo a inventar tu propia idea de Dios o dioses! Ya que ninguno de los existentes en las religiones del mundo te satisfacen, no te queda otra salida: Inventas una nueva idea de lo divino, la dichosa Energía esa. Cuando te auto-proclamas agnóstico, lo haces respecto a un dios que sólo está en tu cabeza, Moncho! ¡Nadie cree en ese mismo dios! Primero inventas tu propio Dios, y luego dices que no estás seguro si existe o no! Y si pensaras en un millón de dioses posibles, ¿dirías un millón de veces que no puedes estar seguro si existen o no?

—Claro, ¡no puedo estar seguro!

¡¿Pero cómo no puedes estar seguro de algo que tú mismo has inventado!?

—err...

Para ser agnóstico, hace falta al menos UN dios de referencia, ¿no?

—Por supuesto.

¿Qué sentido tiene dudar, o decir "quién sabe", o decir "es posible" cuando todas las referencias las has creado tú mismo, sacándotelas de la manga?

—Explícate mejor.

Moncho, y si te dijera que Paramajumba, (el dios que antes dijiste que era posible que existiera), me lo inventé yo....

—¿¿¿Ahhh!?? ¡Qué cabronazo! ¡Eso no se hace! Me cogiste de pendejo... En verdad, me duele, loco...(sniff)

Moncho, lo que te pasa a ti, es que confundes la posibilidad de imaginar algo con la capacidad de establecer la posibilidad de que ese algo exista. Imaginas e inventas tus propios paramajumbas, lo que te da la gana, y luego te dedicas a dudar sobre ellos.

—¡Dudo, porque es mejor dudar que tener una certeza de algo falso!

Igual que te pasó con Paramajumba. Yo te engañé. Tú como agnóstico, te engañas a tí mismo, viviendo en algo parecido a una constante duda eterna, un juicio donde ninguna de las partes logran convencer a nadie. Y nunca llegas a una conclusión ni veredicto, porque suspendes el juicio ANTES de buscar evidencias. Te conformas con que alguien plantee una idea más o menos interesante y no muy descabellada, para darle el beneficio de la duda.

—Es sensato, ¿no? ¡Mi deber es dudar en ellas antes de afirmarlas o negarlas!

Moncho, no tienes que dudar en absolutamente nada que no tienes motivos para dudar! Eso son los dioses! Hay montones de ideas interesantísimas rodando por todos lados. Pero eso no significa que lo que relatan sea real, o que existan evidencias o pruebas que las apoyen. Te recomiendo que la próxima vez, antes de siquiera dudar, pidas evidencias a quien te ofrece alguna idea nueva sobre Dios. Para que luego, si finalmente vas a dudar, te asegures que estás dudando de algo que merece la pena ser dudado; y que no te surjan nuevos paramajumbas. Los juicios siempre deben aspirar a llegar a un final. Eso es algo que tu no conoces. Porque los juicios que has llevado a cabo han sido juicios ficticios, sin evidencias, destinados a la inconclusión.

Todas las hipótesis que tu dices dudar como agnóstico, son hipótesis ofrecidas por los teístas. (Los ateos no proponen hipótesis alguna sobre Dios). Si alguna te ha hecho dudar, quiere decir que ha habido algo en ellas que te ha echo flaquear. Algo que te impide decir "vaya, todo esto de los dioses es una verdadera mierda!" Algún elemento teísta te ha seducido.

—¡Imposible!

¡Sí es posible! Pues todo lo que creemos "saber" sobre Dios, son ideas promovidas por teístas. Lo que ocurre es que tú no sabes definir cuáles son esas ideas en específico que te seducen. Si ninguna te sedujera, hace rato hubieras abandonado tu eterno juicio sobre la existencia de Dios. Y te habrías dado cuenta que es absurdo dudar en la existencia de los dioses, tan absurdo como es negarla o afirmarla.

—¿Por qué absurdo?

Porque no puedes afirmar, negar, o dudar una idea que no conoces ni sabes qué significa. Cuando te pregunté qué dios crees posible, me saliste con no-sé-qué-coño de Fuerzas y Energías, demostrándome que no tienes ni puta idea de qué carajo piensas que es dios!

—Y tú que sabes tanto, ¿qué crees que haría si dejara de dudar sobre esa existencia?

No lo sé, mi mente es incapaz de llegar a una respuesta.

—¡No jodas! Dime.

Espero que tranquilizar y definir esa mente, y darte cuenta de quién eres.

—¿Y qué carajo crees que soy?

Un ateo en negación, con una imaginación precoz.

por: JLG

lunes, 16 de julio de 2007

Europa: reino del anti-Cristo

¿Quién lo diría? El bastión geográfico de uno de los tres grandes monoteísmos se despide lentamente de la religión. Europa no sólo fue la cuna del cristianismo, también fue el lugar donde se desataron las más cruentas guerras religiosas, donde se inventó el concepto de "herejía", la casería de brujas, las Cruzadas, la Inquisición, la Encomienda, el lugar donde se libraron batallas entre católicos y protestantes, y miles de conflictos más en el nombre de Cristo y su señora madre, la siempre siempre virgen.

El año pasado, el final del conflicto armado en Irlanda del Norte marcó una nueva etapa en la historia Europea. La paz en Irlanda representa la solución del último gran conflicto relgioso en la Europa Occidental. Y tomando en consideración que un continente que durante los últimos dos mil años siempre se traía alguna guerra santa de por medio, esto resulta muy significativo.

La consolidación de la Unión Europea no sólo ha traído estabilidad económica a la región. También ha estrechado los vínculos culturales y sociales entre todos los países de Europa. Antes esta función la llevaba a cabo la religión. La Iglesia católica, y más tarde las gemaciones del protestantismo unificaban sus reinos en base al terror, la espada, y el miedo a la excomunión. Hoy día los Europeos están unificados por el diálogo, la colaboración y la democracia.

Para todos los ateos del mundo, es un motivo de regocijo ver el mapa que aquí les muestro. Este mapa, sacado de la encuesta Eurostat de Eurobarometer (2005), representa los niveles de religiosidad en los paises que forman parte de la Unión Europea, y la candidata Turquía. A mayor porcentaje de religiosidad, más oscuro el color que marca al país. La media europa de personas que dicen creer en Dios es de solo un 52%. El 27% dice creer en cierto tipo de espíritu o fuerza vital. Un 18% dice ser ateo/agnóstico. Es especialmente notable el hecho de que un país como Suecia declare en la encuesta un nivel de ateísmo/agnosticismo de aproximadamente un 85%!! Estonia le sigue con un 84% que dice no creer en Dios.

Esta encuesta aunque no es conclusiva, nos permite llegar reafirmar que 1) A mayor desarrollo económico y social, menores son los niveles de religiosidad; 2) Que la relación entre mayor status económico y protestantismo/bajo nivel económico y catolicismo, sea un hecho.

Este último dato no es nada nuevo. Ya hace un siglo el sociologo alemán Max Weber escribió su famosa tesis, La ética protestante y el espíritu del capitalismo, donde logró relacionar convincentemente la capacidad de los pueblos protestantes de crear una ética del trabajo que propició el desarrollo del capitalismo; mientras que los países católicos, destacados por su superstición y vagancia, quedaron relegados a un segundo y tercer plano.

El caso más ejemplar de como la desaparición del catolicismo se tradujo en una época de prosperidad es España. Durante la dictadura de Franco, España era un país muy católico, donde se prohibía el divorcio, el uso de anticonceptivos, y besarse en público. Nada más Franco estirar la pata, y establecerse la democracia y el gobierno secular, los españoles de los campos salieron de cagar en las letrinas en 1980, para despertar en la octava potencia mundial 25 años más tarde. (Sí gente, mientras Blondie cantaba Heart of Glass, en España a mucha gente le ponían su primer inodoro.)

Si la transición del catolicismo al protestantismo fue el primer cambio para un progreso definitivo en los países del Norte; el segundo gran cambio fue la secularización de los países del norte; un proceso originado en Francia durante el siglo XVIII (con raíces en corrientes humanistas durante el Renacimiento). El protestantismo permitió a Europa desencadenarse del yugo del Papa en Roma. El secularismo permitió a Europa desencadenarse del yugo de la religión.

Sin embargo, la religión continúa siendo un fenómeno importante en Europa. Podríamos decir que mientras más católico es un país, más capacidad tiene la iglesia de inmiscuirse en la política. Todos hemos oído del entrometimiento del Vaticano en la política de Italia. En España, la iglesia católica ejerce actualmente el control sobre la cúpula que controla al mayor partido conservador. Sólo hace falta escuchar la emisora oficial de la iglesia, conocida como la COPE, para tener una idea del nivel de manipulación al que la Iglesia pretende someter al pueblo español. El poder de la COPE sobre el Partido Popular, es similar al poder que ejercieron avechuchos como Jerry Falwell y Pat Robertson en las campañas de George W. Bush.

A pesar de estos casos patéticos, que muestran a una iglesia debilitada, asfixiada y desesperada (insinuando que el presidente socialista Zapatero puso las bombas en los trenes de Madrid para llegar al poder), podemos decir que Europa se encuentra encaminada hacia una plena secularización. Con esto no pretendemos que desaparezcan las iglesias o las religiones, sino que se quede de una vez establecida una verdadera separación de Iglesia y Estado, incluyendo que las iglesias no reciban excenciones contributivas, o ayudas económicas directamente de los contribuyentes; que no existan más escuelas católicas pagadas por los gobiernos; que no se pagen más visitas papales con dinero público. En fin, que la Iglesia pague lo que todo negocio privado tiene que pagar. Que no se le den consesiones especiales de ningún tipo. Todo esto, apreciado lector, no es una fantasía. Ya está ocurriendo! Si piensas que el desarrollo de una sociedad secular es un espejismo. Presta atención a lo que está ocurriendo en la Unión Europea. Si el origen del cristianismo fue Europa; el origen de su colapso también es Europa. Luego seguirá el resto del mundo. El progreso que el secularismo puede traer, será ejemplo para otros países no-cristianos. Y en un futuro no muy lejano los países musulmanes no tendrán remedio que imitar los modelos progresistas de Europa. EEUU habrá quedado en la sombra del olvido. Al fin nuestros decendientes vivirán en un mundo donde los ateos no seremos minoría. La fe, y el pensamiento defectuoso generado por ésta, desaparecerá. Y así, con plena libertad de pensamiento, podremos fomentar en nuestros hijos y nietos la utilización del pensamiento crítico, y propiciar una generación de personas capaces de utilizar su inteligencia para encontrar soluciones a los grandes problemas mundiales que se avecinan.

Viva el secularismo! Viva la Europa secular!

Painting my life away

Últimamente ando con unas cargas que me quedan pocas ganas de pensar. Así que pensé en postear una pequeña muestra de lo que hago cuando no estoy perdiendo el tiempo en el web: Pintar.

Se preguntarán, y qué diablos tiene eso de irreverente. Pues nada, pero lo pongo si acaso alguien me la compra y me saca de la miseria.

Aquí está el proceso de una de las pinturas que expuse hace unos meses. El título es Geomancias VI.

Paso uno y medio.


Paso dos.


Paso tres.

Bueno pues ahí está. Para que luego no digan que las pinturas abstractas son "par de brochazos y manchas".

Hubo más pasos, bocetos en tinta, etc., pero por vagancia y no sacar la cámara en plena inspiración, lo dejé en tres fotos.

Espero les guste!

Cuando me hice adolescente


Me gusta viajar, porque cuando viajo me doy cuenta de lo ñoño que es el ser humano. Yo recuerdo que antes me burlaba de los mexicanos que cuando se iban par de semanas fuera de México, los veías contrabandeando latitas de chiles verdes. ¡Coño, si vas a viajar, es pa conocer cosas nuevas, incluyendo la comida típica de otros paises!

Pues a los boricuas nos pasa algo parecido. Cuando estamos fuera nos comienzan a escacear cosas. El Adobo Bohío, los plátanos verdes, la yuca, la yautía, el panapén (esto sí que es una joya), las quenepas. En fin, cosas cotidianas que un simple viaje vuelve artículos de lujo. Todos son indispensables para la felicidad de un boricua en la luna. Pero si hay algo que yo he extrañao sobre todas las cosas cuando he viajao es:

la MALTA INDIA.

Las bebidas de malta son todo un éxito en algunos países latinoamericanos, incluyendo Puerto Rico. Existen muchos mitos alrededor de ellas. Que si contienen alcohol, que si dan insomnino, que si le das a una mujer preñá una caliente aborta, etc. En los años de la pavera, beberte una Malta India era todo un ritual de adolescencia. Una botella de malta bien bien fría, no sólo te quitaba el calor y te daba energía (bombeando como 500 gramos de azúcar al organismo, llevándote al borde de la diabetes); también te daba carta de entrada en el bar mitzvah de los eructones.

Eructuar después, y durante, una Malta India, comenzó originalmente como parte del proceso de apreciar sus ingredientes gaseosos. El sabor de una malta, jamás estaría completa sin el contrapunto del eructo. El "eructo maltoso" contiene las claves bajas del sabor que no se aprecia en la lengua, ni en su forma líquida. Hace falta lanzar el contenido frio de la botella al estómago, y esperar que emerga de la tripa, en forma espumosa, el residuo químico gaseoso del corn syrup, para sí alcanzar el disfrute pleno. Así, el eructo surgió como herramienta de auxilio al paladar, pero pronto los jóvenes boricuas encontramos en la malta nuevos tipos de uso.

Como ya dije, las maltas no faltaban en nuestros ritos de llegada a la adolescencia. Su consumo no sólo era barato, y permitido por los adultos, sino también propiciaba una serie de duelos entre los chicos. En ellos cada uno intentaba reforzarse a sí mismo su ideal de "masculinidad", batiéndose a eructos con cuanto enemigo pudieras. El ansia de triunfo en un duelo eructil de este tipo nos obligaba a usar el ingenio, y desarrollar nuevas tácticas de combate. Así surgían toda una serie de gases, que teníamos clasificados por volumen, intensidad, tono, timbre, color, y en algunos casos olor. Algunos tragaban aire para reforzar el gas de la malta y tirarlo con más fuerza. Otros, aguantaban la respiración. La legenda urbana decía que si aguantabas dos minutos, eructabas tan duro que hasta te salía el gas por los ojos. Pero mi técnica fue una desarrollada por mí mismo: tomarme la malta entera de golpe, luego rodar por el suelo, y dar saltos como un energúmeno. La primera vez que lo hice, mis amigos pensaron que me había dado epilepsia. Pero ellos no sabían lo que tenía planeado, ni que llevaba 3 meses practicándolo. El resultado fue el eructo más brutal y apestoso jamás emitido por una garganta humana; que hasta Doña Bibí (una anciana que no salía de su casa ni pa comprar un litro de leche) se asomó al balcón y nos aplaudió.

Esa técnica me ameritó otro gran éxito. El descubrimiento de un nuevo residuo eructil: el salivón. De ahí surgieron las emisiones de los más feroces flemones. La flema creada en el proceso de batir la malta internamente, era buena materia para escupitajos. Los flemones post-malta batida eran pastosos, espumosos, color caramelo; imposibles de lanzar a lo lejos. Pero ahí radicaba su utilidad. Yo vivía en un edificio de 20 pisos. Así que nada más práctico! Los gargajos se convertían en drop-bombs capaces de reventar todo un día de carwashing. Así que después que nos tirabamos los eructos, subíamos a la azotea, y comenzaba el bombardeo de nuestros B-52s. Aquello no era escupir, sino un...."dejarlos caer", y luego reir sin parar. Bautizamos carros, bicicletas, guardias de seguridad, y una vez hasta le pegamos uno a un bebé en su carrito. Nunca supimos quién de nosotros había dado en el blanco, porque la única regla tras escupir era esconder la cabeza para que no nos atraparan. Asi que todos escupíamos juntos a la vez, de modo que no quedara en evidencia ninguno afuera con su cabeza de pendejo.

Esos eructos y flemones me ganaron la apreciación del clan. De la noche a la mañana pasé a ser "cool". Pero no me duró la gloria mucho. De tanto estar fastidiando, los dioses me castigaron con un catarro brutal. Estuve una semana missing-in-action secándome los mocos, y precisamente en esos momentos de soledad, logré descubrir una nueva materia para joder la pita... Pero eso es tema pa otro post. Ahora estoy investigando, c´omo carajo me llevo mi six pack de maltas pa mi proximo viaje, sin que los de aduana me pillen. ¿Alguna sugerencia?

viernes, 13 de julio de 2007

¿Qué es eso del "burden of proof"? (parte 2): evidencia, la maldita evidencia

En la comunidad científica hay un tipo de protocolo donde se trata de que los mismos experimentos sean llevados a cabo por científicos que no se conocen, de modo que los resultados no se vean afectados por elementos personales.
Cada vez que un científico tiene una idea brillante, tiene la opción de desarrollarla por su cuenta. Pero dado que en el mundo científico se habla un mismo idioma, existe la capacidad de trabajar en equipo (siempre y cuando haya el billete necesario, claro).

Pero antes de que un científico pueda ser tomado en serio por el resto de su comunidad, debe PROBAR que sus ideas e hipótesis merecen la pena ser estudiadas. Quizá alguien pregunte, "¿Y por qué si el número de los otros científicos es mayor, no les toca a ellos probar si las hipótesis son correctas?"

¡¡Y ahí está la clave, que distingue el pensamiento científico del religioso!!

Los creyentes liberan a su líder religioso de tener que probar que "dios le ha hablado", o que "hace milagros", etc. Por eso siempre los líderes religiosos se salen con la suya. Porque los feligreses poseen un sistema de pensamiento inmaduro, que no comprende el principio del burden of proof. Lo que libra al Papa, o al Patriarca, o al pastor de marquesina, de tener que probar sus afirmaciones es el aura de autoridad. La autoridad, atribuída al mismo Dios, es la excusa que permite a los religiosos decir la locura que quieran, y ser tomados en serio.

Pero a los científicos no hay aura, ni dios, ni diablo que los salve de la carga de la prueba. Todos los científicos, desde el pequeño al grande, tienen un imperativo categórico:

Si afirmas algo, la carga de la prueba recae en tí.

Esto quiere decir que un científico puede decir lo que le de la gana. Pero si ni él, o su grupo de colaboradores, son capaces de aportar evidencias que apoyen sus afirmaciones, entonces sus plantemientos no son considerados materia científica, ni siquiera materia de discusión.

Para que una idea sea considerada idea científica, aquel que la ha propuesto debe asumir la responsabilidad de aportar las evidencias necesarias. Si Ramoncito dice que "la energía protocósmica aplicada a un paciente de sida, reduce sus niveles de radicales libres, y esto estimula su sistema inmunológico"; no le toca a Juanito, a Lola o a Jaimito probar que eso sea cierto. Quien debe probarlo es Ramoncito, y sólo Ramoncito.

Si Ramoncito no aporta pruebas para su hipótesis, NADIE en el mundo científico prestará la mínima atención a lo que dice. Le darán a sus ideas la misma validez que a Santa Claus.

Eso es lo que diferencia a un ateo-científico de un agnóstico. Me pregunto cuándo comenzarán los "agnósticos" contemporáneos a darse cuenta que no tiene sentido mantener una postura indefinida o de "mente abierta" ante ideas absurdas para las cuales no se han ofrecido pruebas. Es hora de que los agnósticos dejen de lamerle el culo a los teístas, quienes son los que en primer lugar han inventado a los dioses.

Según la lógica de los agnósticos, no sólo deberíamos ser agnósticos frente a Dios, sino también frente a los Pitufos, el monstruo verde del armario, y el fantasma de Cantinflas. ¿Qué diferencia hay entre ellos y el mono-dios del desierto bíblico? Ninguna. Todos son seres imaginarios. En todos hay carencia de evidencia. Y en el momento que nos definimos como "agnósticos" frente a ellos, estamos asumiendo posturas ante tales ideas. Y asumir posturas implica valorar, tomar en consideración algo que aun no ha ganado el mérito de ser considerado seriamente. Algo que un científico jamás haría.

(Agnóstico que me lees: Tú no propones la existencia de Dios. La proponen los teístas. Entonces pídele evidencias y pruebas a ellos. Pídelas antes de asumir la postura del "quién sabe...", o "es posible que Dios exista." Verás que no ofrecen prueba alguna, sino verborreas contradictorias basádas en escritos de la Edad de Bronce, y que no tiene sentido mantener una actitud inconclusiva frente a sus delirios.)

¿Qué ocurre luego de que el científico presenta las evidencias necesarias?

Las evidencias provienen de las observaciones y resultados de los experimentos. Luego de establecer sus hipótesis como verdaderas, el científico debe permitir a otros científicos repetir el mismo experimento en las mismas condiciones. En la comunidad científica hay un tipo de protocolo donde se trata de que los mismos experimentos sean llevados a cabo por científicos que no se conocen, de modo que los resultados no se vean afectados por elementos personales. Si los demás científicos corroboran los resultados del primero, entonces las ideas comienzan a tomar validez científica real y a repercutir. Todo conociemiento científico repercute. Pues cada nuevo descubrimiento afecta necesariamente el conocimiento que le rodea.

Lo que para un científico a veces toma años de sudor, quizá toda una vida; un religioso se lo ahorra en un minuto con un "dios me dijo..." o "X libro dice..." Qué bonito! Este es el tipo de pensamiento que fomentan los agnósticos —frecuentemente sin saberlo— cuando ponen en cuestión los productos del pensamiento defectuoso de los teístas.

Asumir el método científico es lo más cercano a estar BLINDAO de cometer errores. Pero aún así, los científicos saben que su conocimiento puede cambiar. No es porque el método está mal. Sino porque el conocimiento científico es acumulativo, y mientras más se sabe más cambian nuestras nociones sobre la naturaleza. Esta es de las virtudes qué más contrastan con los religiosos. A pesar del ego de los científicos, el método científico impone un tipo de "humildad", que los obligta a aceptar que los conocimientos que defienden hoy, mañana podrían resultar insuficientes o incluso falsos. ¿Qué religión tiene este safeguard anti-ego? Ninguna.

Esto explica por qué la religión es causante de tantos conflictos mundiales. La religión se niega a aceptar que sus principios fundamentales cambien. ("La Biblia es la palabra eterna de dios, nos dicen") De este modo, a medida que la sociedad evoluciona, surgen cuestionamientos, e intentos de adaptar la religión estática al cambio de los tiempos. Los fundamentalistas se resisten alejarse de "los fundamentos", los progresistas abogan por reinterpretaciones más modernas. Y entre medio hay toda una serie de grados. Pero el resultado es el mismo. NUNCA se ponen de acuerdo. Y los científicos, no importa qué materia discutan, tarde o temprano, sí lo logran.

Las religiones, por su propia naturaleza, son incapaces de hallar consensos. Por eso son un peligro para la especie humana. Pero por favor no caigamos en la trampa de creer que es nuestro deber batallar a las religiones. Nuestro deber, como ateos escépticos, es fomentar un nuevo tipo de pensamiento, basándonos en lo que hemos aprendido del método científico. Un pensamiento fundamentado en el consenso, la honestidad, y no en derechos divinos. El día que las personas —sin importar a qué se dedican— aprendan a pensar científicamente, las religiones caerán por sí solas.

El burden of proof, la carga de la prueba; una simple idea que aplicada desde un inicio a nuestra forma de pensar, puede hacer la diferencia entre el progreso y la auto-destrucción colectiva.

miércoles, 11 de julio de 2007

¿Qué es eso del "burden of proof"? (parte 1): trascendiendo a Babel


Cuando las personas quieren comunicarse entre sí, deben someterse a unas reglas de juego:

1) dominar un idioma
2) expresar ideas
3) escuchar ideas

Pero resulta que esto no les asegura que la comunicación sea efectiva o coherente.

Así surgen nuevas reglas, como por ejemplo:

4) sólo debe hablar una persona a la vez, sin gritar

Cumplir esta regla de por sí es una proeza. Pero si las personas logran someterse a ella, tienen una recompensa: pueden profundizar en el tema que les interesa. Así, cuando la gente se pone "profunda", se dan cuenta que necesitan reglas adicionales para comunicarse:

5) establecer la definición exacta sobre los conceptos que se discuten

6) estructurar los pensamientos de manera ordenada

Ya vamos progresando. Las personas que hasta aquí llegan, se dan cuenta que el haberse sometido a tantas reglas tiene una gran ventaja: de la comunicación de ideas pueden surgir nuevos conocimientos e ideas. Cuando esto ocurre, las personas entusiasmadas notan que les hace falta algo más, para evitar que tanto conocimiento se les venga encima. Es entonces cuando:

7) establecen un sistema lógico para organizar y analizar el conocimiento.

Y helo ahí: ¡el nacimiento de la ciencia! Y bravo a Aristóteles, a quien le debemos gran parte de ese empuje racional.

Si algo admiro de la comunidad científica, es que han podido ponerse de acuerdo en cómo comunicarse. Gracias al lenguaje común, el lenguaje científico, cuya virtud es que no importa de qué cultura, edad, raza, sexo, religión, filosofía, sea un científico, siempre va a poder comunicarse claramente con otros científicos. Esta es la ventaja que tiene la ciencia sobre todo el resto de sistemas de pensamiento y las religiones. Mientras los religiosos se matan entre sí, los científicos construyen mundo. Mientras los ideólogos se acusan entre sí, los científicos hallan respuesta a problemas que atañen a toda la humanidad. ¿Por qué? Porque en la ciencia se habla un mismo idioma.

Y tú, lector quizá te preguntes cuál es la clave que ha permitido que los científicos hayan alcanzado ese estado. La respuesta es que tras cientos de años, incluyendo luchas y derramamiento de sangre, se ha logrado crear un sistema sólido, en el que todos tenemos derecho a participar, siempre y cuando cumplamos con una regla:

Antes de que una idea propuesta sea aceptada como correcta, se debe comprobar su veracidad.

(Entiendo que a los religiosos que estén leyendo esto les entre una repentina piquiña en el culo. Ok, no se preocupen. Démosle un minuto para que abandonen la sala...)

Y el primer principio que hace funcionar a ese sistema es el llamado "burden of proof" (la carga de la prueba.) Lo digo en inglés porque me gusta más la palabra burden, ya que tiene una connotación de "peso", "angustia", "sacrificio". Sí, los científicos cada día viven un viacrucis, que ni el católico más fervoroso puede imaginar. En el mundo científico, podrán existir charlatanes escondidos. Pero ninguno se libra de esto: El que abre la boca primero, es quien explica.

(continúa)

Los peligros de ser hombre

Todos los días en los telenoticiarios, nos hablan de que si fumar, beber, usar drogas, etc. son factores de riesgo.

Tantos cigarrillos suben tanto tus probabilidades de cancer pulmonar.

Tanta grasa sube el riesgo de infarto.

Tanto stress...etc.

Yo creo que hay un factor de riesgo que no suele comentarse mucho:

Ser hombre, sí, llevar huevos entre las patas.

Las mujeres se quejan de que su género sufre discriminaciones, que si la regla, el PMS, y la menopausia. Tienen la razón. Está del carajo ser mujer. Pero ser hombre también conlleva lo suyo. Es como si llevaramos en nuestros genes una predisposición a auto-jodernos.

Los hombres son más violentos, por lo tanto están más expuestos a meterse en problemas, peleas, carreritas de carros, el show off, el orgullo, y por lo tanto a matarse.

Los hombres son los que mandan a las guerras a matarse. (Y los que las inventan.) Los hombres son los que tienen que ir a recoger escombros cuando hay terremotos.

Los hombres son los que suelen meterse en deportes como el futbol americano a partirse vértebras. O al boxeo para aplastarse las narices.

Cuando hablamos de maltrato conyugal, es cierto que hay hembras que son unas harpias; pero son los del género masculino quienes suelen terminar matando a sus parejas, degollando a sus hijos, y todo ese tipo de aberraciones.

Las mujeres en las últimas décadas han comenzado a realizar actividades riesgosas que antes sólo los hombres hacían. Pero son una pequeña minoría. En general, las mujeres son mucho más prudentes que los hombres a la hora de cuidar sus vidas. El interés de las mujeres por los deportes, por ejemplo, no tiene nada que ver con las ganas de los hombres de hacer el Tarzán. Esta conducta selvática no se trata de impresionar a las chicas. A los hombres les encanta impresionarse entre sí. Sentirse que son los más jodones del clan, aunque no haya ni una hembra a la vista.

Es muy jodido saber que por haber nacido así, tanto la sociedad como mis genes me exponen a situaciones que aumentan el riesgo de perder mi vida futilmente. A veces me siento avergonzado de ser hombre. Y realmente no entiendo qué carajo ven las mujeres en nosotros... Quizá sea porque ellas también tienen un gen cavernícola escondido.

martes, 10 de julio de 2007

El agnosticismo (parte 3): Cómo superar el miedo a volar

(viene del post anterior)

Una buena manera de hacerle entender a un creyente o a un "agnóstico" lo que sigfnica el ateísmo es haciendo una lista con todas las deidades existentes en la tierra. Digamos que recogemos el nombre de 50,000 dioses, incluyendo Alá, Yahvé, Jehová, Hera, Osiris, ángeles, santos, semi-dioses, ninfas. Luego, incluso podemos añadir dioses inventados por nosotros mismos! The Flying Spaghetti Monster, por ejemplo.

Tras completar la lista. Ve leyendo uno por uno, y preguntándote si CREES o NO CREES en él. Presta atención, no se trata de si sabes o no sabes. Esto es un ejemplo de cómo no debes empezar.

¿Artemisa?

—Pues...er...no sé.

¿Apolo?

—Ay!...No lo puedo saber.

No no no no no! Recuérdalo, por favor. No se trata de si sabes o no. Las creencias las tienes o no las tienes.

Si después de haber leído toda la lista de 50,000 deidades, al final tienes 50,000 contestaciones "No creo". Entonces, querido agnostico, ahora sí tienes gnosis!! ahora Sí SABES que no crees en un carajo!!! Y eres un ateíto polluelo acabaíto de verse los granitos en el espejo!

Pero, presta atención. Si cuando estuviste leyendo la lista, y por ejemplo, cuando llegaste a "Jesucristo" o a "Yavé", te tambaleó la lengua, o te atacó una repentina parálisis facial. Entonces amigo mío, debes cuestionarte POR QUÉ precisamente esas deidades del desierto de Canaá, te hacen flaquear, y por que las otras nó. Cuestiona tus creencias. Investiga en tu cultura. Haz repaso de qué te inculcaron desde chiquito. Pero no te desalientes, querido agnóstico. Tengo buenas noticias para tí. Si flaqueaste, es porque ahora sí tienes gnosis!!, ahora Sí SABES que sigues siendo teísta, creyente!!! Y eso es un buen paso!

Así que ya no tienes excusa para seguir utlizando esa etiqueta de "(a)gnostico". Porque ahora sí, ahora sí sabes! ;-)

El agnosticismo (parte 2): ¿grados entre teísmo y ateísmo?

(viene del post anterior)

Aquí continúo mi despotrique contra el mal llamado "agnosticismo", que no es otra cosa que un vértigo al Juicio Final.

Hace poco encontré en el web un chart, que ejemplifica perfectamente la visión absurda de los agnósticos. La tabla hace una división entre ateos y teístas, sobre una absurda inclusión de gnosticismo y agnosticismo. (Cómo nos encantan las tablitas!)


Imagen: Ejemplo de la mogolla conceptual que hace un agnóstico con tal de que no le llamen ateo.
A propósito de esta exposición, aclaremos los términos:

Gnosis, viene del griego, y significa "conocimiento". "Gnóstico" en este sentido significa "que sabe o conoce". Agnóstico, por lo tanto es "carencia de conocimiento", que no sabe. Y pongo énfasis en la palabra saber.

Teísmo significa la creencia en la existencia de una(s) divinidad(es). Ateísmo, es la carencia de dicha creencia. Ni más ni menos. Así pues mientras (a)gnosis nos refiere al conocimiento (saber), (a)teísmo nos refiere a la creencia (creer).

El chart mezcla el saber y el concimiento con la creencia. Para resumir, el objetivo del chart es decirnos que hay grados de "certeza" (gnosis) entre el teísmo y el ateísmo. Hay grados de ateísmo, grados de teísmo, grados de agnosticismo, etc.

Según ese chart, podría darse el caso, por ejemplo, de una persona que cree fuertemente en dios, un teísta gnóstico ("Dios existe, lo creo y lo sé, sin duda alguna"); pero un día se le muere Fluffy, y su creencia se debilita, y se convierte en un teísta agnóstico ("Dios existe, pero....hmm...") Esa misma persona, digamos que se pone a leer a Nietsche, y pasa a ser un ateo agnóstico ("Creo que Dios no existe,...pero puede que..."). Finalmente el tipo manda pal carajo a Dios, porque la mujer le pegó los cuernos con el hermano, y se convierte en ateo gnóstico. ("Dios no existe...¡y bien que lo sé!").

Este chart tiene una virtud, y es que pone en relieve las diversas posibilidades en la evolución de un creyente o un ateo. Los ateos mayormente no llegan al ateísmo de la noche a la mañana. El camino es gradual. Pero hay un momento donde se da un salto. Donde algo en la mente hace el Click final. Y ese es el momento donde el teísta se vuelve ateísta. Entre ambos escalones no hay grados. Hace falta un salto, como en las casillas de Monopoly. Si no das ese salto, no eres ateo, sino un teísta poco convencido, o casi al borde del "lado oscuro". Pero ateo, nop.

El mayor error de este chart, grave error, es que pretende definir el ateísmo en base a la idea de "gnosis", saber que Dios existe o no existe. Por eso hay tanto cristiano por ahí acusándo a los ateos de arrogantes intelectuales. Y en eso tienen razón, siempre y cuando parten de la definición erronea sobre ateísmo. Una definición que los agnósticos se dedican a reforzar continuamente. Pero el ateísmo no tiene absolutamente nada que ver con gnosis, ni saber, ni conocimiento de la existencia de Dios. El ateo no tiene nada que callar, negar, ni afirmar sobre Dios. Por ejemplo, yo soy ateo. Y si me preguntas "¿Sabes si Dios existe o no?" Yo contesto: "No tengo ni puta idea de lo que me estás hablando!" Lo mismo pasaría si yo le preguntara al cristiano "Sabes si Paramajumba existe?"

En la tabla, el recuadro de la izquierda abajo, iguala el ateísmo "fuerte" con el "ateísmo gnóstico". Y esto es un total disparate. Ser un ateo gnóstico, es como decir "Soy ateo, porque sé que Dios no existe!" El ateísmo no se define en base a un conocimiento, sino en base a una creencia. No es que el ateo "no sepa que existe Dios" o "sepa que no existe", sino que NO CREE en dios, no valida ese término, quizá lo encuentra irracional, tan irracional como "paramajumba".

Así pues, lo que divide a un teísta de un ateo, no es un grado de conocimiento, sino la presencia o no presencia de una creencia. Noten que el conocimiento es algo que sí puede ser gradual, como se puede ser bruto en mayor o menor nivel. Pero cuando hablamos de la diferencia entre creyentes y ateos, nos referimos a dos categorías distintas: creencia o no-creencia. Podrán haber millones de grados de creencia, desde la certeza más absoluta hasta el "católico semi-conciente" que va a misa cada 20 años. Pero entre la creencia y la no-creencia, no hay grados, sino un abismo. Ni escaloncitos ni puentecitos que nos hagan el salto al vacío menos amargo.

Así que agnostico que me lees. Lamento informarte, que el ateísmo no tienen un carajo que ver con saber si dios existe o no. Toda tu etiqueta basada en la término gnosis, es un disparate. Y aquí, te vamos a ayudar a superar tu fobia a las alturas.

(continúa)

El agnosticismo (parte 1): Paramajumba

Existen personas que piensan que la palabra "agnóstico" implica una actitud moderna de mente abierta, open-mind. A algunos les gusta proclamarse "agnósticos" porque de esa manera huyen de los absolutos y las certezas maléficas.

Los agnósticos con frecuencia dicen "Yo no puedo saber si Dios existe o no." o "Es imposible probar que dios existe, pero la falta de evidencia no implica que no exista."

He ahí el fallo. El agnóstico, sin darse cuenta, da validez a la idea de Dios. Acepta la hipótesis de Dios, aunque no le hayan aportado evidencias que la sustenten. Al hacerlo, el agnóstico refuerza el teísmo.

Cuando alguien dice "Dios existe", el agnostico dice "Talvez".

Pero cuando alguien dice "Paramajumba existe", ¿qué diría un agnóstico?

Y tú, apreciado lector, preguntarás, ¿qué carajo significa "paramajumba"?

Y yo pregunto: ¿¿Qué carajo significa "dios"??

A lo que quiero llegar es que "dios" es un concepto que puede significar CUALQUIER cosa. Y en el momento en que un agnóstico dice que es posible que dios exista, está afirmando la posibilidad de que exista...exacto, cualquier cosa!

Todavía estoy esperando que un agnostico salga y me diga "Es imposible probar que paramajumba exista, pero la falta de evidencia no implica que no exista."

Que se vayan a jugar con la inteligencia de otro.

Nota: Paramajumba es el dios iguana de la iguana mascota de un primito mio.

(Continua)

En Latín Denuevum

El católico promedio no tiene la menor idea de lo que significa su fe. Yo recibí una educación católica tradicional, estudié con hermanos de la orden marianista. Así que puedo alardear de haber sido indoctrinado y brainwasheado por una sucursal del Vaticano, Inc. Y hoy, que soy ateo, eso me causa una angustia existencial: saber más de catolicismo que los mismos católicos.

Cuando discuto de religión con un católico, siempre termino dándole lecciones de catecismo 101. Y eso me hace sentir como un cura. Y lo detesto. No puedo evitar caer en la trampa. Osea, para discutir con un católico, primero hace falta aclararle al católico su propia creencia! Y esto es un trabajo titánico, porque los catolicos en general no tienen ni puta idea de nada!!

En este sentido, prefiero discutir con protestantes. Porque ellos no tienen toda esa estructura dogmática, ritualista, y de tradiciones como los católicos. Con los protestantes sabes ya cuál es el terreno de combate: la Biblia y su irracionalidad.

Pero bueno, volviendo a los católicos. Hace unos días, el nuevo Papa Benedictus XVI se salió con una de las suyas: reenforzar el uso de la misa en latín. ¿En qué mundo vivirá este tipo? Recuerdo que cuando Ratzinger fue elegido, muchos decían que sería un "Papa de continuidad", alguien que básicamente daría seguimiento al "legado" de Juan Pablo II. Pero Ratzinger parece ser mucho más conservador que Carol Mochila, o como se llamara aquel. Ohh...cómo van quedando atrás aquellos años izquierdosos del Concilio Vaticano II, Juan XXIII y Pablo VI.

Cuando me enteré de la noticia me llevé las manos a la cabeza. Si los católicos ya no entienden nada de su doctrina, encima les meten las misas en latín! Qué va a ser de mí!! Si antes dependían de mí para enterarse qué coño significaba un bautizo, tendré que aprender ahora latín para traducirles la misa?

lunes, 9 de julio de 2007

¡Seamos herejes felices!

Toda comunidad tiene sus héroes. Los militares tienen sus condecorados. Los religiosos tienen sus santos. Los seres imaginarios sus Papás Pitufo. Los ateos también tenemos nuestros héroes. Y hoy me refiero a una persona viva, Judy Hayes, la hereje feliz.

Judy Hayes es una humanista secular americana, que fue de las pioneras en el ciberateísmo. Su sitio, The Happy Heretic, nos trajo la aportación de que el ateísmo y la crítica religiosa podían combinarse con una muy buena dosis de humor. Judy escribía sólo una columna mensual. Pero vaya columna! Era de calidad publicable, para hacer un libro. Pero un buen día Judy, quizá por los achaques de la edad, se cansó. La mujer recibía cientos de e-mails agradeciéndole su trabajo. Pero entonces Judy, hizo un experimento: intentó comprobar la fidelidad de sus lectores y el nivel de interés. Y decidió cobrar para que pudieramos leer su site. Por un momento pensé que nuestra Judy se nos iba del dark side, y abrazaba al sistema. En realidad, ella quería cobrar una verdadera porquería. Algo como $10 al año. Decía que era para pagar un "hosting" decente. Y ya que tantos disfrutábamos de sus escritos, pues ella entendía debíamos ser los mismos en contribuir a esa causa. Pero vaya desilusión se llevó. Pues casi nadie se suscribió a su nuevo site. Esto fue un "golpe" muy duro para Hayes, y la señora finalmente decidió cerrar su site.

Me gusta pensar que esa no fue la verdadera razón para que Judy abandonara el internet. Creo que la señora sencillamente se sentía cansada, y le agobiaba la "responsabilidad" de que tantos esperaran con ansia su super columna mensual. A pesar del triste desenlace, pienso que cumplió bien su trabajo. Judy nos hizo reir. También nos hizo ver a todos lo absurdo del llamado "agnosticismo". Pero quizá su mayor aportación fueron, lo que yo llamo, sus tres preguntas pilares. Judy nos pedía que cada vez que alguien nos preguntara si creemos en Dios, debemos contestar con una pregunta:

"Which god?" (¿Cuál dios?)

Las creencias religiosas son tan numerosas y diferentes, que la gente incluso de una misma religión, tiene ideas distintas sobre dios. En resumen, todos los creyentes son co-creadores de su dios. Especialmente los católicos, que les encanta acomodar a su dios a la medida. Así que si alguien quiere saber si creemos o no creemos, primero debemos exigir que se nos especifique cuál es ese dios. Por ejemplo: :¿Crees en Dios?", nos preguntan. Contestamos, "¿Cúal? ¿Zeus?, ¿Apollo?, ¿Thor?, ¿Krishna?, ¿Yukiyú?, ¿Quetzatcoatl?" Ciertamente todos son muy distintos, ¿no?

Así pues, la primera forma en que un ateo comienza a desarmar la irracionalidad de un creyente, no es poniendo en duda la existencia de su dios, sino dejando en evidencia la existencia de miles de otros dioses. Luego el creyente deberá justificar por qué cuando usa el término "dios", se refiere a ESE dios en específico y no a otro.

Así, después que el creyente define a cuál dios se refiere, surge la segunda pregunta de Hayes:

"¿De qué manera es tu dios diferente de otros dioses, y por qué lo escoges a él y no a otro (s)?"

El sentido de esta pregunta, es poner en evidencia que cada dios es una opción, una elección entre miles de miles. Queremos llegar al punto de establecer que el creyente cree en el dios que cree porque culturalmente es el dios que le ha tocado. (Para esto hay excepciones, pero pocas). Los que nacen en medio oriente seguramente creeran en un dios monoteísta como Yavé o Alá. Los que nazcan en EEUU seguramente creerán en Jesús. Los que nazcan en medio de un bosque seguramente creeran en otra deidad local. El ateo escéptico debe hacerle entender al creyente que su fe, seguramente le viene por herencia y no por voluntad propia. Así llega la tercera y última pregunta fundamental que debemos hacerle al creyente:

"¿Cómo puedes saber que tu dios es el verdadero, si cada persona religiosa del planeta piensa exactamente lo mismo sobre su dios, tiene unos textos sagrados que así lo dicen, tienen milagros que lo avalan, y una enorme tradición detrás?"

Bueno, la pregunta se explica sola. Poco a poco le hacemos ver al creyente que existen opiniones diferentes a la suya, y que éstas tienen exactamente la misma fuerza ideológica y fervorosa! Todas usan los mismos argumentos y las mismas artimañas. Entonces, ¿en qué se basa para haber elegido a ese dios? La respuesta obligada es que sólo se basa en la tradición, o en que sus padres le inculcaron esa fe, porque es imposible que antes de haberse hecho creyente, haya estudiado todas las opciones disponibles en el supermercado de las religiones.

Los cristianos justifican su creencia en textos sagrados. ¿Pero acaso no es esto lo mismo que hacen los musulmanes o los hinduistas? La típica repuesta de un cristiano, por ejemplo, será: "Porque lo dice la Biblia. Porque mi Dios hace milagros. Porque Jesús resucitó." Pero esto es lo mismo que diría un hinduista, usando diferentes nombres: Porque lo dicen los Vedas. Porque Brahma hace milagros. Porque Krishna resucitó. etc etc.

Cómo saber cuál es el verdadero dios? No puede ser que todos sean verdaderos, ya que las doctrinas se contradicen abiertamente. Así que no valen respuestas como "Todos creemos en un mismo Dios" o "Todos los caminos conducen al mismo sitio." Mentira. Así que por favor, díganos ¡Cuál es ese dios en que debemos creer, y qué lo hace especial frente a los demás!

Las tres preguntas pilares de Judy Hayes, seguramente no saquen al creyente de su irracionalidad. Sin embargo, son buenas punta de lanza en una conversación sobre religión. Ayudan al ateo a tomar la iniciativa. Y también ayudan a que el creyente tome conciencia de que su religión no es la única en el mundo, que hay mucha gente que cree cosas distintas y otras igualitas con distinto nombre. No se trata de destruir al enemigo, sino de ayudarlo. Esa es una de las lecciones de Judy.

Es una pena que se haya retirado, y que yo no tenga el talento de transcribir sus pensamientos a la manera de ella. Pero lo importante es que cada vez somos más quienes tomamos su antorcha, y podemos recordarles a los creyentes, que en el mundo también habemos herejes felices.

sábado, 7 de julio de 2007

El que esté libre de vagancia, que coja el primer machete! (parte 2)


La isla donde el machete se enmoheció

Por favor, pónganse todos de pie, para entonar los himnos.

La Borinqueña (himno nacional - versión actual)

La tierra de Borinquen, donde he nacido yo.
Es un jardín florido de mágico primor.
Un cielo siempre nítido le sirve de dosel.
Y dan arrullos plácidos las olas a sus pies.

Cuando a sus playas llegó Colón
Exclamo lleno de admiración:
Oh, Oh, Oh!

Ésta es la linda tierra que busco yo!
Es Borinquen la hija la hija del mar y el sol!
Del mar y el sol! (x3)

letra: Manuel Fdz. Juncos

Pronto:

La Cañaveraleña

La tierra de la zafra, donde macheteo yo.
Es un cañaveral jodido donde me dejo'el sudor.
El calor siempre encabronao me dicta qué hay que hacer
y da una aroma trágica al sudor de mis pies.

Cuando a mi casa llegó Mr. Jones
y me dijo "el mambó se te acabó".
Ay, Ay, Ay!

Ésta no era la idea que tenía yo!
Ya no hay más cupones, sólo machete y sol!
Machete y sol! (x3)

letra: JLGiles

El que esté libre de vagancia, que coja el primer machete! (parte 1)

Experimento: ¿Cómo fabricar un país de eñangotaos?

1. Selecciona una geografía y clima benevolente. (Esto logrará que se sientan a gustito, chinguen mucho, y no se vayan.)

2. Envíales misioneros y diles que lo que han estado haciendo durante los últimos mil años ha estado mal. (Esto ciertamente reforzará su nivel de auto-estima.)

3. Somételos durante 500 años. (Esclavízalos pero dales pan, mucho pan.)

4. Dales cupones de alimentos. (Esto asegurará su fidelidad e impedirá que se te rebelen.)

5. Cámbiales el machete por el sofá y el televisor. (Enséñales cómo deberían vivir.)

6. Cámbiales el parque por el centro comercial. (Enséñales qué deben tener para vivir así.)

7. Si se te rebelan, ponlos a bailar y mover el culo. (Salsa, reggaetón, merengue, cualquier ritmo es válido.)

8. Cuando te pidan derechos e igualdad, dale más cupones. (Mientras más hijos tengan, prémialos con más cupones. Aun queda tiempo para explotarlos más.)

9. Cuando los cupones no le den para mantener sus familias numerosas, envíales representantes de Visa y Master Card. (Cuando los tengas pagándote el "mínimo mensual", serán tus eñangotaos por buen tiempo.)

10. Cuando en mayoría te pidan la estadidad, ya los habrás exprimido suficiente. Entonces lánzalos al mar, tírales flee, o una bomba atómica. El asunto es zapateárselos rápido. (Seguramente te despedirán con una lagrimilla en sus ojos, mientras en agradecimiento te cantan God Bless America).

11. Mándales un fax de farewell con su nuevo himno.